Con respecto al artículo “El punto de partida”, creo que en lo que se refiere a la programación de una materia en concreto, el itinerario tendría que ser algo así:
- Información:
- Los contenidos son fundamentales. El estado actual de conocimientos en la materia concreta a impartir. Pero esto es relativamente fácil. Está en los tratados y en las revistas especializadas, que hay que llevar al día.
- Los conocimientos previos de los alumnos en la materia. Aquí hay a veces una gran disparidad.
- Los contenidos que se imparten en otras asignaturas que podríamos considerar próximas o fronterizas a las nuestras: esto muchas veces falla, y aparece el oscurantismo. Parece que tratamos de examinar a nuestros compañeros y esto no es siempre bien recibido.
- Asignaturas para las cuales, los conocimientos de la nuestra son fundamentales.
- Análisis: ¿Cuál es el estado de las cosas?. Muy importante analizar toda esta información y entender qué significa.
- ¿qué tipo de profesional queremos formar?
- ¿Con qué medios contamos?
- Este apartado será ya para plantearse los objetivos, la planificación para tratar de obtenerlos en las condiciones reales que tenemos.
- Por último está el reportaje de resultados. Creo que este apartado, aunque es el último, casi debería considerarse en primer lugar, ya que va a condicionar todo el proceso.
- Pienso que sólo deben programarse cosas que puedan ser evaluadas. Sólo así se puede realizar ese proceso de feedback y saber si hemos tenido o no éxito en el proceso.
- En este apartado es donde yo veo actualmente el principal problema, en la situación real en que nos encontramos, ya que los sistemas tradicionales de exámenes son absolutamente limitados, y las alternativas, mucho mas personalizadas, tienen mucha dificultad de aplicación con la situación de masificación que tenemos en las aulas.
Esto no es más que un burdo resumen. De todo esto se puede hablar muchísimo más y espero que así lo hagamos.
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